viernes, 11 de julio de 2014

Excusas.

Había salido de una función de teatro, de sala repleta y aplausos presentes. Ya no se inmutaba por las parejas circundantes en las sillas aledañas, ni reparaba en adjetivos sobre las actuaciones de los artistas, sencillamente olvidaba sus preocupaciones y las dejaba a un lado. No reparaba en el hueco que tenía en su pecho, o al menos eso pretendía. La noche aún lo mecía con su manto azul marino.

Más tarde, recorrió los salones en los que ella paseaba, con un suspiro se llevó sus alientos y con un cigarro los expulsó. La ingravidez de su cuerpo lo guiaba por pasajes que sabía, no volvería a visitar. Su mirada nostálgica reflejaba dentro suyo todo lo no-vivido. El tiempo se había vuelto la excusa perfecta para que los recuerdos se pudrieran y el olvido los añeje.

Ya es tarde, se dijo. Con el peso encima de su vacío, dirigió sus pasos hacia la salida. Extrañaba los momentos y sus amigos ausentes, extrañaba la paz, extrañaba tanto que sin darse cuenta otra vez se había estrellado en esa nebulosa del pasado. Su pecho era una gamma de sensaciones, momentos y rarezas descuidadas. Uno a uno, se fueron mostrando las noches, las visitas a la azotea, las sorpresas que llenaban su corazón, las miradas que hablaban, las luces. Ya es tarde, se dijo.

Recordarte es un hermoso lugar.


lunes, 9 de junio de 2014

Noción

Nuevos vientos
frescos

Algo así me contó un sueño
entre sábanas
empapadas por la luz de la mañana

Pero después
a golpe de mediodía
lo olvidé

Debo admitir
que sus frases nuevas 
refrescan la soledad

Es como si la noche 
prestara sus luceros para 
dormir 
 
Y el firmamento hilara
uno a uno
mis sueños.

Quédate ahí, no vuelvas
déjate llevar por las nubes

Solo por hoy
date esa licencia

viernes, 30 de mayo de 2014

Craso

Los ríos revolotean en su cabeza

en forma de cabellos
se enredan
se trenzan
se arriesgan
a perderse en el aire

Ella no sabe,
hace más de 12 lunas
no piensa bajar la guardia

y mientras tanto
el verde seda lo seduce
noche tras noche

con gritos que nadie oye
con lágrimas que caen al abismo

siga pa' lante, Capitán

Los Eternos Castigos Mentales
quiebran
y decepcionan

...

Hoy decido
ir al delirio de la tierra
llena de locura

aunque todos asuman mi cordura
y la buena voluntad
de mis acciones

domingo, 18 de mayo de 2014

Otro delirio

El tiempo pasó, eran otra vez dueños de su mundo. En algún rincón de sus cabezas las canciones aún no dedicadas sonaban en su cabeza. Siempre quedaron pendientes.

No paró de girar el mundo, es obvio que ha aprendido la lección. O al menos eso le dicen. Su silencio es miedo, ya lo han dañado suficientes veces. Las nubes intentan inspirarlo, pero aún no despega los pies del suelo

Mentira

Muchas cosas que decir
El sueño atrapa

En un balbuceo
en medio de los mares
de la inconsciencia

Seguro,
sí, seguro

Las gotas caerán
como lluvia de invierno

Mientras tanto
fingiré disfrutar la fiesta

jueves, 15 de mayo de 2014

Pienso

Ver los rostros de la gente pasar.
Guarda en tus entrañas
esa sinceridad problemática

jueves, 1 de mayo de 2014

Frío

Son días raros, - me dijo ella - pareciera que todos los colores andan más vívidos que de costumbre, que tu pelo se enrede más que en otras ocasiones y la distancia juegue ping-pong con nuestros deseos.

No entendí a qué se refería la verdad. Para ser sincero, ahora lo entiendo menos. Recobré esta conversación a raíz de su cumpleaños. Ya no estaba. Se sentía como un vacío peculiar, una canción instrumental donde todo lo que faltaba para que dé la sensación de "final" era la voz que sirviera de hilo conductor. Es difícil describirlo. A veces creo que es producto de mi imaginación, sin embargo la memoria no me falla tan groseramente (todavía). Tal vez sea mi ya conocida ansiedad frente a obstáculos.

Se acaba el verano, los heladeros miran con tristeza las despedidas del sol. Sigo tecleando lo que viene a mi cabeza, apenas con un filtro para callar las cosas que oculto. Hay varias frases que he olvidado. Sé que hoy es un día importante, pero las palabras se atoran antes de que forme una frase coherente. Es una pena, mi lucidez estará de vacaciones hasta nuevo aviso. Y es que mi delirio hoy se ha escapado de mi. O quizás yo me alejé.

De cualquier modo, solo miraré al cielo esperando que caiga otro día. Al menos eso pretenderé. 


sábado, 26 de abril de 2014

Mira al cielo

La Nobleza, cómo me dijiste
no es fácil de mantener

ahora, en medio de mi poca cordura
y la desazón de estos días

ruego a la Luna
que no me deje solo esta noche

domingo, 20 de abril de 2014

Café tres

Me gusta escribir, de cuando en cuando, a modo de monólogo, como si alguien me escuchase al otro lado de la pantalla. Escucho en plena noche fuegos artificiales, seguro de alguna festividad que ignoro. Escucho música relajante, descubro nuevos artistas, el teclado me saluda con cada frase que logro formar. Darle animismo a algunas cosas que vivo es un afán que trato de no olvidar, si no el silencio se molestaría conmigo.

En eso, un despertador salta en plena madrugada. Un clarinete le responde como por arte de magia, con una secuencia de arpegios que no respiran entre sí. En medio de este rayo de luz que logré guardar en mis manos, he aprendido a mirar con tranquilidad los hechos desfasados de lo cotidiano. Al menos la guitarra me dice eso. 

Pero no olvidar, ojo, que sigo siendo una persona. Más que un medium que se deja llevar por lo que la inconsciencia le susurra por ratos, soy un ente que cree aún en la nobleza (sí, aún). A pesar de los dardos que el infortunio suele lanzar en mi espalda (ni qué decir de sus lanzas afiladas). Para mi sorpresa y a veces desdicha, aún creo en las ficciones que me inculcaron de niño. Tal vez haya un mundo mejor allá afuera.

martes, 15 de abril de 2014

Café dos.

Dia 2. 

Alguna noche de abril de este año. Un café con leche en la mesa, en la derecha un hombre que desea follarse a todas las jóvenes que cruzan el local. Un poco más atrás, un señor de edad, discapacitado. Aunque gruñón, su corazón aún alberga algo de ternura.

Yo, por otro ,lado, los recuerdos empiezan a perderse en la nebulosa del olvido. Aún así desearía que se quede ahí donde está, inamovible, frío. La verdad es que solo dejo matar el tiempo, concentrándome en otro tópicos. Divago en mundos que he construido mientras juego en mi cabeza (como sueños lúcidos). A veces reniego de la mierdilla del mundo, que me saluda todos los días con su tóxico sol. 

Mi corazón late a mil. Hoy no desaparece. Engendro, no vuelvas a mi, tengo pánico dentro de mi mentirosa tranquilidad.


jueves, 10 de abril de 2014

Café uno

¿Y qué? La tierra ha vuelto a jugar a las chapadas de nuevo con el sol. Otra mujer se acomodó de nuevo en la cama del hotel, satisfecha. Aunque no me lo crea, sigo acá, clavado en una silla del restaurant que nos faltó visitar. Pierdo mi mirada en la calle, como esperando verte de nuevo, con una sonrisa por y para mi, como si ahora fueran a cambiar las cosas mágicamente.

Un café con leche por favor.


lunes, 7 de abril de 2014

Jodido.

Sopla, sopla fuerte. La marea crece, todo parece ir en contra en el camino. Adelante, mira hacia adelante. El peso que llevas contigo es suficiente con sentirlo, no es necesario girar tu mirada. Las casas caen a tu alrededor, tus pocas certezas se van derrumbando a cada paso que das y el miedo invade cada poro de tu piel. Solo quedan recuerdos. No titubees. Por lo que más quieras, no lo hagas.

Te confesaré algo, me dije en algún rincón de mi cabeza. ¿Sabías que aún hay lágrimas contenidas en el umbral que dejo al pasar? ¿Sabías que me siento sin fuerzas desde hace días y la inercia es la que me empuja? Si fuera todo un mal sueño ya hubiese despertado, o hubiese controlado mi sueño. Pero no es así, los ojos no los puedo cerrar (¿o abrir?). Así permanezca en la más penetrante oscuridad las cosas no cambiarán, no ahora. No creas lo que te dicen las fotografías, ni los rumores. Yo estoy acá, jodido. Y con mi poca dignidad, me atrevo a sonreír por cortesía, a mirar al cielo esperando que caiga la suerte y me secuestre a un mundo mejor. O al menos eso me susurran las voces que hay dentro mío. Y también las sombras que mi ser recrea durante las noches.

jueves, 23 de enero de 2014

Redención

Vino mi tio, después de tiempo. A él le tuve miedo, esa parálisis discreta cuando se siente cerca. Llegó, comió, y se fue sin despedirse pero con su esencia rondando por la casa. Temblaba, el miedo se hacía más fuerte. Me duele a veces el solo rememorarlo. Un cúmulo incalculable de dudas y terrores me encarcelan. Tengo que liberarme, y no sé cómo. Recuerdo una de las tantas frases que me dejó en su estadía:

Tienes esencia de artista, corazón desgarrado

Y en medio de esta pobreza, pienso, no sé por qué me aterra tanto esa idea.


martes, 21 de enero de 2014

Sorpresa

martes, 14 de enero de 2014

Olvido

La taza sigue esperando que la lleve a lavar. La guitarra de mi cabeza sigue siendo objeto de mis fantasías, practico, creo, repaso. La gente dejó de importarme, o al menos eso intento tragarme en medio de risas hipócritas y muecas de dolor asolapadas con una conversa cotidiana que no me importa ni un carajo. Son esos ratos donde el arte se salva y te dice que aún hay un camino.

Mirar el cielo soleado es ahora un pasatiempo de verano, en medio de las personas que miran las pantallas de sus smartphones que al parecer, a veces, les roba un poco de su inteligencia. Y yo acá, iluso, queriendo imitar a las palomas para huir, lejos, muy lejos.