viernes, 30 de mayo de 2014

Craso

Los ríos revolotean en su cabeza

en forma de cabellos
se enredan
se trenzan
se arriesgan
a perderse en el aire

Ella no sabe,
hace más de 12 lunas
no piensa bajar la guardia

y mientras tanto
el verde seda lo seduce
noche tras noche

con gritos que nadie oye
con lágrimas que caen al abismo

siga pa' lante, Capitán

Los Eternos Castigos Mentales
quiebran
y decepcionan

...

Hoy decido
ir al delirio de la tierra
llena de locura

aunque todos asuman mi cordura
y la buena voluntad
de mis acciones

domingo, 18 de mayo de 2014

Otro delirio

El tiempo pasó, eran otra vez dueños de su mundo. En algún rincón de sus cabezas las canciones aún no dedicadas sonaban en su cabeza. Siempre quedaron pendientes.

No paró de girar el mundo, es obvio que ha aprendido la lección. O al menos eso le dicen. Su silencio es miedo, ya lo han dañado suficientes veces. Las nubes intentan inspirarlo, pero aún no despega los pies del suelo

Mentira

Muchas cosas que decir
El sueño atrapa

En un balbuceo
en medio de los mares
de la inconsciencia

Seguro,
sí, seguro

Las gotas caerán
como lluvia de invierno

Mientras tanto
fingiré disfrutar la fiesta

jueves, 15 de mayo de 2014

Pienso

Ver los rostros de la gente pasar.
Guarda en tus entrañas
esa sinceridad problemática

jueves, 1 de mayo de 2014

Frío

Son días raros, - me dijo ella - pareciera que todos los colores andan más vívidos que de costumbre, que tu pelo se enrede más que en otras ocasiones y la distancia juegue ping-pong con nuestros deseos.

No entendí a qué se refería la verdad. Para ser sincero, ahora lo entiendo menos. Recobré esta conversación a raíz de su cumpleaños. Ya no estaba. Se sentía como un vacío peculiar, una canción instrumental donde todo lo que faltaba para que dé la sensación de "final" era la voz que sirviera de hilo conductor. Es difícil describirlo. A veces creo que es producto de mi imaginación, sin embargo la memoria no me falla tan groseramente (todavía). Tal vez sea mi ya conocida ansiedad frente a obstáculos.

Se acaba el verano, los heladeros miran con tristeza las despedidas del sol. Sigo tecleando lo que viene a mi cabeza, apenas con un filtro para callar las cosas que oculto. Hay varias frases que he olvidado. Sé que hoy es un día importante, pero las palabras se atoran antes de que forme una frase coherente. Es una pena, mi lucidez estará de vacaciones hasta nuevo aviso. Y es que mi delirio hoy se ha escapado de mi. O quizás yo me alejé.

De cualquier modo, solo miraré al cielo esperando que caiga otro día. Al menos eso pretenderé.